La Tumba No Pudo Detenerlo

Oscura la noche, todo acabó,
El miedo reinaba en cada corazón.
Pero al tercer día el cielo tronó,
La piedra movida, su tumba brilló.

Jesús resucitó, ¡gloria al Rey!
Venció la oscuridad con su poder.
La tumba no pudo detenerlo,
Él es la vida, el Salvador.

Sus manos abiertas, su amor mostró,
Las huellas del clavo son nuestra redención.
Su voz nos llama a confiar en Él,
Porque en su victoria renaceré.

Jesús resucitó, ¡gloria al Rey!
Venció la oscuridad con su poder.
La tumba no pudo detenerlo,
Él es la vida, el Salvador.

Muerte, ¿dónde está tu aguijón?
Tu poder se desvaneció.
Cristo vive, Cristo reina,
Él es la luz de mi canción.

¡Gloria, gloria al que venció!